Ya se conocen los ganadores de la tercera edición del Programa Tradiciones, que apoya proyectos de preservación de las prácticas más genuinas de la cultura popular portuguesa. Los nueve proyectos seleccionados serán apoyados con hasta 250.000 euros con el fin de desarrollar iniciativas que protejan y promuevan estas tradiciones ancestrales, muchas de ellas en peligro de extinción.

El proyecto «Almuerce y cene con nosotros» es uno de los ganadores de esta edición. Es promovido por la Asociación del Turismo de Aldea, de Ponte de Lima, y pretende que los habitantes de diversas aldeas abran las puertas de su casa e inviten a desconocidos a celebrar una comida tradicional. Es una oportunidad de conocer la historia y la gastronomía de estas aldeas, mientras se promueve la identidad comunitaria y la disminución del aislamiento de las poblaciones.

La cestería tradicional y el cultivo de los corrales de laguna, en el municipio de Montalegre, serán promovidos y preservados por el proyecto «Carrejadas», promovido por el Consejo Directivo de los Baldíos del Cabril. Esta iniciativa es una de las ganadoras de esta edición del programa.

También ha sido seleccionado por el jurado el proyecto orientado a proteger el trabajo de los artesanos de Penafiel. «De las artes y oficios tradicionales de Penafiel» registrará las memorias, técnicas y productos utilizados por los artesanos para luego promover la transmisión de estos conocimientos a las nuevas generaciones. 

«Las contradanzas y cuadrillas como patrimonio cultural inmaterial en la región duriense», promovido por la Universidad de Oporto, ha sido escogido por estar encaminado a preservar las contradanzas y cuadrillas durienses, una celebración cultural en extinción debido a la falta de bailarines tradicionales. 

En el caso del río Duero, un pueblo de remeros, el Centro de Recreo Popular de Arnelas quiere formar nuevos remeros que dominen el arte de navegar en los tradicionales barcos pesqueros del bajo Duero. El apoyo al proyecto permitirá adquirir cuatro barcos pesqueros, así como costear el mantenimiento de barcos tradicionales.

La Cámara de Abrantes quiere hacer el levantamiento histórico de la producción de seiras y capachos, que se utilizan en los lagares de aceite y se hacen mediante la tradicional producción en esparto. El «Espartero: artes de entrelazar» promueve talleres de producción tradicional y también cuenta con el apoyo de la tercera edición del Programa Tradiciones.

El proyecto «Promoción y construcción artesanal de bombos, cajas y pífanos» pretende preservar los saberes asociados a la construcción de bombos y demás instrumentos musicales, originarios de la zona del Fundão. Se promoverán talleres para enseñar la construcción de estos instrumentos y así promover la transmisión de conocimientos entre generaciones.

«El (re)descubrimiento del cofo y su arte» es otro de los proyectos ganadores, que pretende mantener el arte de trabajar el cofo y reavivar su identidad cultural a través de talleres. El proyecto se promueve por el Grupo Recreativo Vilaverdense, de Figueira da Foz.

Por último, el noveno proyecto que se eligió va a preservar y promover el habla de Sines, desconocido por la mayoría de los municipios de la ciudad y que se encuentra en riesgo de desaparición. «Decires» es promovido por la Cámara Municipal de Sines y pretende recopilar y estudiar informaciones sobre este habla, para posteriormente divulgar y promover vocablos y expresiones específicas.

En esta edición, el Programa Tradiciones recibió 67 candidaturas de 91 municipios donde EDP tiene centros de producción de energía. Los nueve proyectos seleccionados se conocieron esta mañana, en un evento en Tomar, donde se celebraron algunas de las tradiciones más genuinas de la cultura popular. En esta gala también se presentaron algunos ganadores de la última edición, que desarrollaron sus proyectos de preservación de la cultura con el apoyo de EDP.

En 2018, el Programa Tradiciones se asoció al Año Europeo del Patrimonio Cultural, que tiene como objetivo llamar la atención acerca del papel de la cultura y del patrimonio en el desarrollo social y económico en Europa, así como motivar a los ciudadanos hacia los valores comunes europeos.

Este programa tiene como objetivo valorar las culturas y tradiciones locales, estimular la autoestima de las comunidades, ayudar a la creación de nuevos públicos, garantizar que las nuevas generaciones valoren e integren las artes y los saberes populares, y evitar la extinción de las mismas.

Desde 2015, el primer año del programa, EDP ha apoyado y acompañado a 23 proyectos a través de la provisión de 400.000 euros, que apalancan más de un millón de euros. Los proyectos que se han apoyado han tenido un impacto positivo en 27 municipios.

Para mostrar todos los valores y la importancia nacional del programa, se ha desarrollado un reportaje especial que se puede ver aquí.