EDP volvió a ser evaluada como una de las empresas a nivel mundial que más se distinguen en el área del combate contra las alteraciones climáticas.

Esta distinción fue atribuida por la Organización No Gubernamental CDP (antigua Carbon Disclosure Project), con sede en Reino Unido, y que anualmente elige al grupo restringido de compañías con las mejores prácticas en esta área.

La organización clasifica a las empresas en cuatro niveles de rendimiento, siendo que EDP fue distinguida en la categoría CDP Climate Change, en el nivel más elevado - Leadership -, con nota "A-", caracterizado por la excelencia de las prácticas ambientales.

EDP se destacó también en la categoría CDP Water, en la que mantiene el nivel de rendimiento "Management", con nota "B".

CDP evalúa anualmente a cerca de siete mil empresas, que representan más del 50 % de la capitalización becaria a nivel mundial, proporcionando información a inversores financieros.

De las siete mil, 280 son utilities y apenas el 6 % merecieron la clasificación "Leadership".

El desempeño de EDP refleja el modelo de negocio que el grupo implementó hace más de una década, con la estrategia de expansión de la producción renovable y la promoción de la eficiencia energética y la movilidad eléctrica.

"EDP ha asumido una estrategia de crecimiento basada en las energías renovables y se ha reforzado la prestación de servicios de bajo carbono, ayudando a otros sectores a descarbonizarse.

En un mundo en profunda transformación, en 2020 el grupo EDP habrá superado el 76 % de potencia instalada renovable y en 2030 habrá reducido las emisiones específicas de CO2 en un 75 %", destaca António Martins da Costa, administrador de EDP.

Aún en el ámbito de la estrategia de descarbonización, EDP prevé a más de 1 TWh de ahorro de energía para los clientes de la compañía y una inversión de 200 millones de euros en Investigación e Innovación, entre 2015 y 2020.

EDP es también la modernización de las redes de distribución, en particular, a través de la instalación de contadores inteligentes en los hogares de 90 % de los consumidores en la Península Ibérica hasta 2030.