EDP ha adoptado una serie de medidas preventivas y de contingencia en vista de la propagación mundial del nuevo coronavirus (COVID-19).

La aplicación de estas medidas se ajusta a las directrices de la Organización Mundial de la Salud (OMS), del Centro Europeo para la Prevención y el Control de las Enfermedades (ECDC) y de las entidades sanitarias oficiales de los distintos países en los que opera el grupo.

El Plan de Contingencia del Grupo EDP adaptado a la situación de la COVID-19 tiene el objetivo principal de gestionar el impacto de la pandemia en los empleados, en los proveedores de servicios y en el negocio de las empresas del Grupo, con el objetivo de:

• Resguardar la vida de las personas, reduciendo el riesgo de contaminación en el puesto de trabajo y reforzando la información y el conocimiento de los empleados en términos de su autoprotección.
• Activar una estructura de decisión y coordinación en EDP y en las empresas del Grupo. 
• Activar los planes de continuidad del negocio, con las adaptaciones necesarias a la COVID-19, para tener una capacidad de respuesta operativa capaz de minimizar las condiciones para la propagación de la pandemia y garantizar el funcionamiento de los servicios esenciales, de forma simultanea.
• Vigilar la evolución de la pandemia, la efectividad de las medidas adoptadas y la necesidad de ajustar o adoptar nuevas medidas dependiendo de los resultados y el contexto externo;
• Dar respuesta a las necesidades de notificación y comunicación, internas y externas.
• Reanudar las actividades normales en condiciones seguras, tan pronto como la situación en cada país/región lo permita.