La Unión Europea da un nuevo impulso a los proyectos de EDP para la transición energética con la declaración del valle asturiano del hidrógeno verde como Proyecto de Interés Comunitario, por parte de la Dirección de Energía de la Comisión Europea. En esta iniciativa, EDP ha incluido su proyecto de hidrógeno para Aboño y también los planes de Soto de Ribera.

Esta selección europea, en la que hay apenas cinco proyectos de electrólisis españoles, reconoce la ambición de EDP de tener en marcha en la región 1 GW de capacidad de electrólisis entre Aboño y Soto de Ribera en el entorno de 2030. Estos dos emplazamientos se engloban en la candidatura que presentó EDP hace casi un año para esta distinción en la que fue necesario acreditar la dimensión europea del proyecto.

Los proyectos de interés común se benefician de procesos acelerados de planificación y concesión de permisos, mejores condiciones regulatorias, menores costos administrativos debido a procesos de evaluación ambiental simplificados y mayor visibilidad para inversores, así como el derecho a solicitar financiación del Fondo Conectar Europa (CEF).

Este reconocimiento para Asturias H2 Valley se suma a los ya obtenidos por el proyecto de hidrógeno de EDP en los últimos meses, constituyendo un caso único en Europa. Es la iniciativa de hidrógeno verde que acumula más reconocimientos de la Comisión Europea, a lo que hay que sumar su localización singular en una zona de transición justa y siguiendo principios de economía circular, por el reaprovechamiento de instalaciones de los emplazamientos de dos centrales térmicas (Aboño y Soto).

En septiembre de 2022, el proyecto de Aboño fue reconocido como Proyecto Importante de Interés Común Europeo (IPCEI), una autorización de la Dirección General de Competencia europea para que el proyecto pueda recibir ayudas estatales por encima de los límites establecidos en la normativa general..

Dentro del PERTE de energías renovables, hidrógeno renovable y almacenamiento (ERHA), el Instituto para la Diversificación y el Ahorro Energético (IDAE), dependiente del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico, publicó durante el primer trimestre de este año la concesión de ayudas al proyecto de Aboño por dos vías, el programa Pioneros y el de Cadena de Valor, así como al proyecto de Soto a través del Programa Pioneros.

El proyecto de Aboño ha recibido también en julio el reconocimiento del Fondo de Innovación Europeo, uno de los mayores y más competitivos instrumentos de financiación pública para apoyar el desarrollo de tecnologías hipocarbónicas innovadoras.

Además, EDP junto con cuatro PYMES asturianas y una leonesa han recibido fondos europeos para desarrollar trabajos relacionados con el proyecto de hidrógeno verde de EDP en Aboño. Es el resultado de la aprobación de una línea de ayudas de la Comisión Europea, a través del denominado fondo I3, que en Asturias ha coordinado la Fundación Asturiana de la Energía (FAEN).

EDP ya ha iniciado la tramitación ambiental de la primera fase del proyecto, 150 MW de electrólisis que entrarían en funcionamiento en 2026.

En el caso de Soto de Ribera, la compañía también ha avanzado con la tramitación ambiental de una capacidad de electrólisis de 5 MW, con el objetivo de ponerlos en marcha en la misma fecha. Y todo esto en un marco regional, Asturias, considerada por la Dirección General de Industria de la Comisión Europea como una de las tres regiones europeas donde se debe dar más prioridad al desarrollo de proyectos de H2.

Con estos proyectos, EDP reafirma su ambición de ser 100% verde en 2030. La compañía está avanzando con su Plan de Negocio 2023-2026, a través del cual realizará inversiones por valor de 25.000 millones de euros en el despliegue de energías renovables, en dotar de mayor flexibilidad a la red eléctrica y en diseñar y ofrecer soluciones innovadoras a sus clientes.